No tener veinte años


Amanece antes de las seis. El frescor primaveral envuelve los ánimos, encoraja la voluntad, ilumina panoramas que el invierno susurraba como imposibles. Nacen hojas de las parras y junto a ellas aterrizan bandadas de cometocinos. En el chat confieso a Sánchez-Ostiz mi asombro ante el milagro pictórico de cometocinos y loicas bajando a beber en el pocillo de piedra. Me habla de las grullas, de su felicidad contemplativa ante el paso migracional de esas aves libres. Pienso en Sadako Sasaki que creyó en la leyenda de las mil grullas. 

Ayer vi bandurrias antecediendo a la lluvia. Siempre pasan un poco antes que las nubes oscuras y el viento norte. En ocasiones las nubes toman un giro imprevisto hacia el este y ellas quedan por mentirosas.

Sánchez-Ostiz recuerda su amistad con Cachín Antezana, prestigioso intelectual boliviano. Ante su pregunta de por qué no escribía sus memorias, Antezana respondió, porque no tengo veinte años y no soy Rimbaud. La pregunta y la respuesta se me incrustan como una daga de hielo en mi espíritu triste. El tiempo es mi kriptonita. Los sueños siguen quedando diseminados como origamis en el lodo. Las expectativas aterrizan sin tren de aterrizaje. Solo puedo volver a los veinte montado en una ucronía literaria, y mi única motivación para hacerlo sería incendiar el planeta. 


Imagen: TIERRAVISUAL JC GEDDA
Juan Carlos Gedda Ortiz, Fotógrafo/Documentalista/Araucanía

5 comentarios :

  1. La nostalgia, la tristeza, la agonía. La forma en que la narra es simplemente bella pero triste y conmovedora como un baldazo de agua helada. Desde que leí La nostalgia feliz de Amelie Nothomb, no dejo de sorprenderme con ese concepto y aspiro a ello tanto como ella porque hasta acá también me invade la pena ante la nostalgia clásica: "Suponiendo que el tiempo sirva para medir algo en el ser humano, son sus heridas. No aspiro a tener ni más ni menos que cualquier otro, o sea: muchas. Lejos de curtirme, este lugar común me deja el corazón a la intemperie."

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  2. Todo tiene el hombre en su alegoría de nostalgias, el viaje , lo causa el autor, como el tiempo y su pasión en orden, su estilo sin rodeos y saber(es)
    Un agrado siempre, leerte.

    Rossana.

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  3. Escritor hermano de la nostalgia.Que reconfortante leerte.

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  4. Interesante relato, te doy la gracias por el texto, espero me des las gracias por la imagen, soy su autor.

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    1. Muy agradecido por tu bella fotografía. Saludos fraternos.

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