Tras la obra de Stefan Zweig

Busco afanosamente toda la obra de Stefan Zweig, un escritor por el que he sentido un particular respeto durante todas mis edades.

En mi pensamiento mantengo grabado a fuego sus Momentos estelares de la humanidad, sus biografías de Nietzsche, María Antonieta, Balzac, Hölderlin, Fouché (quizás uno de los mejores libros de todos los tiempos). Su novela 24 horas en la vida de una mujer, o su relato Carta de una desconocida.

Obra tan vasta y variada, cuya totalidad parece aún desconocida. Siempre hay algo que falta, algo nuevo que aparece desde el olvido. 

En mi archivo digital sólo tengo siete de sus obras. Wikipedia suma 42 obras en el listado bajo la biografía, pero el artículo que presenta a Zweig parece escrito por un estudiante de primer grado. No aporta. No le hace justicia. Es atolondrado.

Hurgando en Google encontré carátulas de libros inencontrables, como Los ojos del hermano eterno, La tragedia de una vida (sobre la poeta Marceline Desbordes-Valmore) o Sigmund Freud. Bajé algunas para luego recordar que debo buscar también esos libros. Castalión contra Calvino no lo conocía. Habla de la lucha ideológica encarnizada entre el tiránico Juan Calvino y el humanista francés Sebastian Castalión.


Un fragmento de este libro:

En el momento en el que este hombre, enjuto y severo, atraviesa la puerta de Cornavin envuelto en su negro y flotante hábito, comienza uno de los experimentos más memorables de todos los tiempos: un Estado que hasta ahora respiraba a través de incontables núcleos vitales debe convertirse en un rígido mecanismo. Un pueblo con toda su capacidad de sentir y pensar, en un único sistema. Es la primera vez que en Europa se acomete el intento de llegar a la uniformización completa de todo un pueblo en nombre de una idea. Con demoníaco celo, con extraordinaria y sistemática meticulosidad, Calvino pone en marcha su osado plan de convertir Ginebra en el primer Estado divino sobre la tierra: una comunidad sin lo que es común en la tierra, sin corrupción, sin desorden, sin vicios y sin pecados. La verdadera, la nueva Jerusalén, de la que habrá de emanar la salvación de todo el orbe. Esta idea única es desde ahora su vida, estando su vida exclusivamente al servicio de esta única idea. (Pág.49)

1 comentario :

  1. Se ha convertido en una odisea rastrear sitios donde se puedan compartir documentos libremente.. todo está en ruinas.. ha pasado por las bibliotecas virtuales un pirómano que merece pena de muerte. Siento profunda pena cuando tropiezo con tantos enlaces caídos, intento seguir adelante y no dejar de buscar.

    ResponderEliminar

Creative Commons License
Cuadernos de la Ira de Jorge Muzam is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Unported License.